El Ayuntamiento de Turre ya ha pagado 960.000 euros a cuatro de los cinco herederos del propietario de 1,5 Has de suelo urbano recalificadas como zonas verdes sin recibir ninguna compensación. Es el 80% de los 1,2 millones de indemnización a que fue condenado el Consistorio. Queda por satisfacer la parte de un heredero que reside en el extranjero y no ha podido recibirla por problemas burocráticos en trámite de solución.
Los hechos se remontan a 1986, cuando el Gobierno dirigido por Francisco Sánchez (PSOE) elaboró unas nuevas Normas Subsidiarias (NNSS) y decidió concentrar todas las zonas verdes correspondientes al pueblo en una sola finca de 1,5 hectáreas, tras la hilera de casas que hay frente a Muebles Núñez, en la zona próxima al cementerio. Se trataba de una parcela hasta entonces urbana propiedad de la familia Rubio.
El entonces alcalde, Sánchez, “olvidó” compensar a la familia Rubio. Al negarle cualquier tipo de aprovechamiento, ya fuera para la edificación agrícola o para montar una industria, debió expropiar y pagar un justiprecio.
No lo hizo, y los herederos reclamaron en 2020 la indemnización que les correspondía por derecho.
Así, a finales del 23, llegó el varapalo para el Ayuntamiento, condenándolo a pagar 1,2 millones a los herederos de la familia Rubio. Y es ahora cuando el alcalde, Arturo Grima, tras solicitar un préstamo, compensado a la familia del propietario.
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