El regidor Martín Morales (Turre para la Gente) está dispuesto a entregar el bastón a la socialista María Isabel López. Debió hacerlo en junio, pero el código ético de su partido le impedía investirla por estar procesada en un caso de prevaricación. Una vez celebrado el juicio, si sale absuelta en primera instancia, la votará. De no ser así, todo seguirá igual, a no ser que el PSOE cambie de candidato
María Isabel López declaró al Tribunal que es la Policía Local quien distribuye la ubicación de los puestos y la alcaldía “no se mete en nada”
El denunciante relató que la Policía Local le llamó para informarle que le negaban la parcela que solía ocupar porque había “favoritismos”
El 2 de noviembre tuvo lugar en la Sección Tercera de la Audiencia provincial la vista de un juicio cuya sentencia tendrá una trascendencia adicional para la procesada.
En esa querella, a la exalcaldesa María Isabel López (PSOE) pueden caerle 12 años de inhabilitación. Está acusada de haber negado la instalación de un puesto de dulces, hace tres años, al Santero, un empresario de Carboneras cuya familia llevaba 49 años estableciéndose en el mismo lugar.
Del veredicto del Tribunal depende que López vuelva a presidir la Corporación de su Ayuntamiento, algo que debió ocurrir el pasado mes de junio. Así lo establecía el pacto de gobierno firmado entre su partido, que obtuvo cuatro concejales, y Turre para la Gente (TPG), cuyos dos ediles sumaban los seis necesarios para cerrar el paso a la Alcaldía al PP, que había conseguido cinco.
Las dos formaciones de izquierdas acordaron que Martín Morales (TPG) sería alcalde durante los dos primeros años del mandato para, después, entregar el relevo a la candidata socialista.
No obstante, llegado el momento, Morales se negó a investir a López. Adujo el carácter de procesada por justicia de la exalcaldesa. Argumentó que el código ético de su partido –también el del propio Partido Socialista- le impedía votarla, aunque mostró su disposición a entregar el bastón a cualquier otro concejal del PSOE.
Mientras tanto, sus ahora exsocios de Gobierno oponían que la imputación contra María Isabel no se refería a ningún delito de corrupción, que era el “espíritu”, aunque no la letra, de la norma de su partido. Además, defendían que “sólo los socialistas” deciden quién es su candidata.
Ya han pasado cinco meses. Desde entonces, los dos ediles de TPG han gobernado Turre con la normalidad que no se presagiaba dada su exigua fuerza -2 ediles- en una Corporación de 11. Más aún. Absolutamente todos los puntos del orden del día de los plenos celebrados durante este periodo han sido aprobados por unanimidad, y el regidor se ha comprometido a negociar su proyecto de presupuestos con la oposición. El PP ha aceptado la invitación. El PSOE no.
Pero la sentencia del caso del puesto de dulces puede cambiar las cosas. Turre para la Gente admite que no es bueno para el pueblo gobernar con dos concejales un Ayuntamiento de once, y han asegurado a esta redacción que, si sale absuelta en primera instancia, investirán a María Isabel López. No esperarían las resoluciones de previsibles recursos que no se resolverían antes del fin del mandato. En caso contrario, sólo entregarían el relevo a otro candidato socialista.
EL JUICIO
¿Qué ocurrió en el juicio? La exalcaldesa confirmó su versión de los hechos. Explicó al Tribunal que, ante la ausencia de una ordenanza específica, tradicionalmente es la Policía Local quien distribuye la ubicación de los puestos y la alcaldía “no se mete en nada”.
Adujo que ese año -2018- se tuvo que reordenar el recinto ferial al no poder disponer “por motivos de seguridad” de una de las parcelas habituales. Ése fue el motivo por el que la Policía habría ofrecido al Santero una ubicación diferente a la que había ocupado siempre. Sin embargo, “él quería colocarse en ese sitio concreto y no quiso moverse”, añadió López.
Tras esto, el turronero se dirigió al despacho de Alcaldía, donde, en presencia del jefe de la Policía Local tuvo lugar un “incidente muy grave”. La exregidora no explicó a los magistrados la naturaleza de ese “incidente”, aunque sí sostuvo que, ante dicha situación “se inició un expediente sancionador” contra el Santero, y el Jefe de los agentes municipales recomendó “no conceder el puesto” al empresario “para evitar incidentes” similares.
EL SANTERO
Por su parte, el Santero declaró ante el Tribunal que todo empezó cuando la Policía Local le llamó para informarle que en la parcela que ocupaba tradicionalmente se iba a instalar “una familia gitana de Turre” porque había “favoritismos, igual que ocurre en mi pueblo [Carboneras]”.
En cuanto al incidente revelado por la exalcaldesa, tras restarle importancia, explicó que finalmente fue sancionado porque se trataba de su “palabra contra la de un policía local, y eso prima”.
Ahora es la Sección Tercera de la Audiencia la que debe decidir si inhabilita a María Isabel López por un periodo de hasta 12 años y, sin saberlo, sobre el futuro inmediato de la Alcaldía de Turre.
“Pistolitas, saca la pistola y pégame dos tiros”
La exalcaldesa de Turre, María Isabel López (PSOE) no detalló al Tribunal de la Audiencia Provincial que la juzga en qué consistió el “incidente muy grave” que tuvo lugar en su despacho y fue el detonante para que el Santero no abriera su puesto de dulces en la feria de 2018, pero sí lo hizo entonces en RADIO ACTUALIDAD.
El Santero se habría dirigido al jefe de la Policía, según contaba María Isabel López, diciéndole: “Te estás metiendo donde no te llaman, dictador, pistolitas, saca la pistola y pégame dos tiros”.
Así pues, la regidora aclaraba que el “mal comportamiento y su falta de respeto a un servidor público municipal” fue el argumento clave para negar la instalación del puesto del empresario carbonero e incoarle un expediente sancionador.