El Pleno de Vera aprobó el 5 de noviembre una rebaja en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) que, en palabras del edil de Hacienda, Alfonso Pérez, dejará “más de 300.000 euros al año” en el bolsillo de los vecinos.
“La intención es contener la carga fiscal sin poner en peligro la viabilidad económica del Ayuntamiento”, explica Pérez.
La bajada es del 3,5%, y fue votada en contra por el PSOE, que es partidario de reducir el impuesto un 10% para situarlo “en el tipo medio aplicado en la provincia según datos de la Dirección General del Catastro”, aduce el portavoz socialista Martín Gerez.